Uso adecuado de las pantallas por nuestros hijos.

¡Llegan las vacaciones! Periodo ideal para jugar más al aire libre y hacer menos uso de la tecnología.

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Las tan ansiadas vacaciones muchas veces nos ponen de manifiesto la necesidad de organizar mejor el tiempo de nuestros niños.

Quizá pasen más tiempo delante de las pantallas de lo recomendado. Hemos de tener en cuenta algunas recomendaciones acerca del tiempo que los pequeños pasan delante de las pantallas, bien sean éstas de televisión, móviles, ordenadores o videojuegos.

Aquí se nos plantea un dilema, ¿es el uso o el abuso de las tecnologías lo desaconsejado?

En los niños más pequeños, hasta los tres años aproximadamente, se desaconseja el uso de estos dispositivos por varios motivos que detallaremos. Y en niños más grandes, deberíamos de hacer un uso racional de los mismos (aquí el problema está en el abuso).

Veamos por qué…

¿Qué dice la ciencia acerca del efecto de la exposición de los niños a la tecnología (tabletas, móviles, televisión, videojuegos…)?

La Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda:

Evitar totalmente la exposición a la TV y otras pantallas a menores de 2 años de edad ya que el cerebro del niño se desarrolla rápidamente durante estos primeros años y los niños aprenden mejor de las interacciones con personas y no con las pantallas.

Para los más grandes de la casa se recomienda crear zonas libres de pantallas y evitar una exposición superior a las dos horas (como profesional, me parece mucho tiempo dedicado a las pantallas, por el mero hecho que ese tiempo dedicado a las pantallas es tiempo restado a otras muchas cosas).

La AAP recomienda que en las habitaciones de los niños no haya ordenadores, televisiones o videojuegos, así como apagar la TV durante las comidas, a lo que yo añadiría también los dispositivos móviles.

Las razones son obvias: pantallas en las habitaciones restan tiempo al descanso, pantallas en el almuerzo resta tiempo a la conversación

Recalca que es importante para los niños emplear su tiempo en juegos al aire libre (en el próximo Newsletter hablaremos de sus beneficios a nivel de desarrollo del niño), lectura, aficiones y uso de su imaginación en situaciones de juego libre.

Nuestra colaboradora optometrista comportamental Fátima Juan, habla de la importancia que para el sistema visual tiene el movimiento. La distancia corta a la que se sitúan las pantallas no ayuda a desarrollar la flexibilidad acomodativa en el sistema visual (el enfoque y el desenfoque, importante para la visión de lejos) y compromete la visión periférica al estar centrados en detalles de la pantalla (visión central). Esta visión periférica es muy importante para el desarrollo adecuado de la visión binocular y la estereopsis (habilidad perceptual a partir de la cual el cerebro es capaz de dar profundidad a lo que ve).

Si no posibilitamos el entrenamiento del sistema visual de estas capacidades tendremos problemas a la hora de desarrollar adecuadamente las habilidades visuales.

Y como nosotros somos siempre el mejor ejemplo  de nuestros hijos, hemos de reducir el uso de pantallas en su presencia porque así estaremos salvaguardando la cantidad y la calidad de las interacciones con ellos, beneficiando así su desarrollo.

— Lucía Lorenzo Quintero.
Licenciada en Psicología.
Máster en Neuropsicología y Educación.